Con la idea en mente de intentar ofrecer a nuestros futuros clientes una alternativa para sus celebraciones ó reuniones que no fuese la del mismo salón o restaurante de siempre, al que ya hemos acudido en otras ocasiones y que no deja de ser una celebración más, amén de las comodidades e intimidad que ofrece el alojar a los invitados en un entorno privado, con el estilo que nos gusta, surgió nuestra apuesta de servicio para cubrir las necesidades que, entonces y aún hoy, existen en el entorno en que nos desenvolvemos.

A quién no le gustaría realizar el banquete de boda de un hijo o hija alrededor de la piscina o en el jardín de casa, rodeado de vegetación, con una iluminación de ensueño y amenizado el ambiente por música en directo. Imagínense lo mismo pero en vez de en un recinto privado, en unos monumentales jardines en los que lo permita la autoridad competente. ¿Y en el claustro de un antiguo monasterio o convento? ¿Qué me dicen de un castillo medieval? ¿Por qué no en la orilla de la playa o en un yatecito de 200 metros de largo? Si bien es cierto que algunos de estos lugares que hemos mencionado posiblemente sean inaccesibles por varios motivos y para algunos de nosotros o bien no reunirán condiciones para la realización de según que eventos por razones de capacidad para infraestructuras necesarias, lo cierto es que la imaginación y en buen gusto de nuestros clientes no dejará de sorprendernos y de alimentar la ilusión de futuros consumidores de nuestros servicios.

Originalmente basada en la cocina tradicional del noroeste Murciano. Utilizamos lo mejor de nuestras carnes de cordero, cerdo y vacuno, así como de las más ricas hortalizas y verduras que podemos encontrar, preparando platos sabrosísimos con recuerdos a la cocina de nuestras abuelas pero que poco a poco se va contagiando de la utilización de productos novedosos así como de las presentaciones y elaboraciones con que predican los representantes de la moderna y espectacular cocina española, aportando a nuestros menús un equilibrio razonable entre ayer y hoy.