10 cosas que no debes hacer en una boda… si eres la madre
La emoción en los ojos, el puro sentimiento, las entrañas, la sangre y la felicidad plena al a ver una parte de su vida caminar junto al amor de su vida. Las madres son otras de las grandes protagonistas en una boda. No cabe duda de que la madre de la novia y la madrina serán las anfitrionas y el gran respaldo de los novios.
En otras ocasiones ya hemos hablado de las funciones o el rol de las madres en las bodas. Ahora queremos darles 10 consejos sobre 10 errores a evitar en la boda de vuestros hijos.
35mm Foto Estudio
1.- Convertirte en Momzilla. Pase lo que pase, no saques lo peor de tí. Si una novia los días de antes con los preparativos puede convertirse en BrideZilla, un pequeño mostruo con las hormonas y los nervios disparados, la madre de la novia debe mantener la calma. En esos días, la tensión se siente, perdónasela a ella y trata de contener la tuya.
2.- Imponer tu opinión. Por su puesto que la visión de una madre y sus consejos son esenciales, tanto para el novio como para la novia. Pero recuerda dar tu opinión acompañando y guiando, no sentenciando. La última palabra la tienen ellos y ese día debe estar al gusto de ellos, porque su boda debe hablar de ellos. En cuanto, a la búsqueda, elección y la última prueba del vestido de la novia y del traje del novio, la compañía de la madre es casi ineludible, nadie los conoce mejor que su madre y ellos esperan una opinión sincera que, a la vez, respete su estilo o look.
3.- Presionar con los compromisos. El tema de los invitados es el asunto más peliagudo de la boda con las familias. Pero trata de entender que más allá de cómo van a entender la boda de tu hija o hijo tus amigos o familiares, si se van a molestar por no tenerlos en cuenta o no estar invitados, lo importante es que ese día ellos estén rodeados de aquellos a quienes les apetece abrazar, besar y compartir algo tan íntimo como su amor. Seguro que lo entenderá. Puede ser que temas más tu vergüenza que la reacción de ellos.
4.- No llevar gafas de novia. Me refiero a que hace tanto tiempo que quizás no te acuerdes, pero seguramente tú también fuiste una novia ilusionada y enamorada que soñaba con la boda perfecta que siempre ha tenido en su cabeza. Ponte las gafas de novia e ilusiónate con ellos, vive este mágico evento con ellos en su misma sintonía, porque no hay nada más desmotivador que sentir que tu madre piensa que "todo esto son tonterías", "que sois unos exagerados", ""que no entiendes tanta parafernalia" o que "en tus tiempos las bodas no eran así".
5.- Hacer más de lo que te piden. Tus manos serán necesarias, ellos necesitarán tu ayuda. Muéstrate abierta y dispuesta, recuérdales que estás ahí para lo que necesiten, pero entiende cuál es tu sitio y ayuda en aquello que ellos te pidan. Ni más ni menos.
Veroa Studio Fotografía
6.- Nervios al vestiros. Un momento crítico donde se concentran todos los nervios, por el instante que se acerca, porque los minutos corren y porque ya nada puede salir mal, es la hora de acompañar a los novios al vestirse. Trata de que sea lo más relajado posible, muéstrate contenta, optimista, cariñosa, ilusionada y aprovecha para decirle lo guapísimo/a que está. Te lo agradecerá. Además, las fotos quedarán preciosas.
7.- Usar el odioso "ya te lo dije". Ante los imprevistos de última hora, los fallos o los errores, por favor, olvida la famosa frase de madre: "ya te lo dije". Tu ya avisaste, habló tu experiencia. Ahora sólo queda buscar soluciones y calmar los nervios. Además, si te ha escuchado, ellos ya sabrán que no te hicieron caso, por eso aún será más admirable y agradecida una actitud positiva.
8.- Abrir la caja de los truenos. No es momento para reproches, sacar viejos conflictos y sembrar dudas. Y si es el novio o la novia quien los saca, paciencia y comprensión, seguro que se debe a los nervios de ese momento y luego sabrá recapacitar.
9.- No participar en la boda. Ya sea en la ceremonia o en la celebración, busca algo que puedas hacer para demostrar tu cariño. Habla con el oficiante o la persona encargada de la organización. Seguro que hay un hueco o un lugar para tí. Y seguro que será una o la más emocionante de todas las sorpresas, lecturas o participaciones. Damos fe. Asi que saca valor de donde sea, busca ayuda para su preparación y lánzate. No te arrepentirás.
10.- Contener las emociones. Disfruta de la boda de la persona que más amas en tu vida. Des-mádrate, deshiníbite, no contengas ni una lágrima, baila todo lo que puedas y no rechaces ningún "que se besen (los padres de la novia, los padres del novio)".
Studio Photo Emilio