¿Qué debes saber antes de lanzarte por una boda exprés?

Una boda en menos de tres meses es posible y, como sabéis, entre los famosos están en auge. Y es que la emoción del momento, tras la pedida, hace que los novios quieran celebrar ese día lo antes posible. En ocasiones, un traslado a otro país, el trabajo o una situación inestable hace necesario que las parejas contraigan matrimonio más rápido y tengamos que saltarnos la agenda recomendada.

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En cualquiera de estos casos, y ya conociendo las claves para organizar una boda exprés, hay algunas cosas a tener en cuenta antes de ponernos una fecha mental, como por ejemplo, los trámites.

Si lo tienes todo en regla y todos tus papeles están en vigor: DNI, certificado de nacimiento y de empadronamiento, entonces quizás yodo pueda ir algo más rápido. Un expediente puede estar resuelto en un mes o como mucho dos, sin embargo, existen ayuntamientos, juzgados o registros civiles más colapsados y con retrasos. Además, depende de dónde vivas las fechas pueden estar cogidas. Una opción, es buscar ayuntamientos cercanos que tengan una mayor disposición de fechas.

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Una vez conozcas la disponibilidad de tu ayuntamiento, recuerda que el segundo gran handicap es el banquete. Por ello, también será más fácil encontrar fechas libres fuera de la temporada de bodas, que suele abarcar desde marzo hasta septiembre. Otra idea es apostar por una boda en viernes, que además tiene muchas ventajas. En cuanto a la celebración, mejor buscar un espacio que ofrezca la posibilidad de realizar bodas civiles en el mismo lugar del banquete y que además cuente con servicios de organización de bodas.

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Por supuesto, el siguiente pensamiento va dirigido al vestido de novia. Con una boda exprés, nos olvidamos de los 6 meses que aconsejados, como mínimo, para tener a tiempo el vestido de tus sueños. Si tienes claro, tu estilo, tu modelo o la firma consulta antes con la tienda, y si lo quieres a medida pregunta los tiempos de confección. Ten en cuenta que un vestido de novia "hecho para la novia" requiere mucha elaboración, por eso quizás la mejor opción sea alquilarlo o acudir a un outlet o showroom.

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Otro aspecto a tener en cuenta antes de poner una fecha cercana es el número de invitados y su lugar de residencia. Lo normal es entregar las invitaciones unos 3 o 4 meses antes de la boda, y en caso de vivir en el extranjero sería de seis meses, pero en una boda exprés ya estaríamos fuera de tiempo. Así, si tienes familiares o amigos que vengan de fuera, puede ser complicado que ellos puedan organizarse. Díselo lo antes posible.

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En el caso de que tengas claro el estilo de boda que quieres y, además, no cuentes con tiempo para dedicarte íntegramente a tu boda, deberías valorar la contratación de una wedding planner. Esta profesional de las bodas no sólo se encargará de la organización integral, además se convertirá en una compañera que te tranquilizará, reconfortará y será catalizadora de emociones y nervios. Siempre velando por vuestros intereses.

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Y, por último, algo a tener en cuenta y que sí que presenta una clara ventaja con respecto a las bodas con más de un año de organización son las ofertas de última hora. Al igual que en los vuelos chárter, las empresas de servicios de boda cuentan con fechas libres que ofrecen a un precio inferior para completar su agenda y de las que puedes aprovecharte para rentabilizar tu gran día.