DIY: Errores comunes que cometemos con el rímel
El rímel es sin duda uno de los productos necesarios en nuestro bolso, pero... ¿Alguna vez te has planteado si lo estás usando bien?
Día a día cometemos errores sin saberlo que hacen que nuestras máscaras de pestañas duren menos de lo que deberían o las usamos de manera equivocada que nos lleva al odiado efecto ‘mapache’
¡Quédate hoy a averiguar nuestros consejos y nunca más te pasará!
No rizar las pestañas previamente
¡No tienes nada que temer al rizador de pestañas! Aunque parece un aparato de tortura es todo lo contrario, no duele nada y no te hará ningún daño si lo usas correctamente. El rizador curvará tus pestañas para que se vean el doble de largas , complementando a la máscara de pestañas y evitando que pongamos capas de más. ¡Tendrás un 2x1... look natural y pestañas envidiables!
Agitar el rímel equivocadamente
Muchas personas quitan el capuchón a la máscaras de pestañas y la agitan metiéndola hacia arriba y hacia abajo, pero... ¡Todo lo contrario! Esto sólo hace que entren burbujas de aire y la máscara dure mucho menos de lo que debería. Para agitarla correctamente, mantenla cerrada, colócala entre tus manos y haz movimientos de atrás hacia delante.
¿Utilizamos la máscara adecuada?
Sin duda este será el error más común que cometemos. Cada persona tiene una clase de pestañas diferentes, y por ello un producto que se adecúe más a ellas.
Existen máscaras para aportar más volumen, más longitud, más separación, más hidratación (humectantes) o resistencia al agua.
Para ello, lo mejor es guiarnos por una profesional que pueda atendernos en una tienda de artículos de maquillaje. Así nos evitaremos disgustos y dinero, ¡Y podrás tener una máscara de pestañas para toda la vida!
Obsesionarnos con las capas
¡Menos es más chicas! Para lograr unas pestañas más largas no necesariamente se necesitan muchas capas de rímel. Demasiadas capas pueden acabar afectando a la salud de tus pestañas y creando efectos antiestéticos completamente opuestos: apelmazamientos y grumos.
Desde aquí os recomendamos que primero ricéis vuestras pestañas, apliquéis como máximo dos capas, y si aun así no es suficiente entre capa y capa añadáis una capa de polvos traslúcidos... ¡Veréis qué volumen!
Manchas... ¡Que no cunda el pánico!
Todas lo hemos sufrido... todo el maquillaje listo, a punto de acabar y... ¡CHOF! Manchurrón de rímel en medio de la nariz, la mejilla o el párpado... Bien, ¡Las prisas nunca han sido buenas! Si intentas quitarte la mancha cuando aún está húmeda, sólo conseguirás restregarla y hacer un desastre mayor. Lo que debes hacer es esperar a que seque (aunque sea desesperante) y retirarla con un bastoncillo ¡Ya verás qué fácil!
Rizar las pestañas después del rímel... ¡NO rotundo!
Hay quien cree que rizar las pestañas después de aplicar la máscara puede ayudar a que las pestañas se fijen aún más en esa posición curvada... ¡Pero todo lo contrario!
Nuestras pestañas son frágiles cuando les aplicamos esta clase de productos, por ello la presión que hace el rizador puede quebrarlas y romperlas.
Recuerda: ¡El rizador siempre antes!
Aplicación incorrecta
La máscara de pestañas no debe aplicarse sólo en las puntas, sino desde la raíz de las pestañas y en movimientos en zig zag hacia arriba. Al principio te costará y te llevará más de un manchurrón, pero sólo así aseguramos una aplicación cubriente y profesional! Además, si eres rubia y tus pestañas son más claras, es aconsejable que también apliques una capa sobre la parte de arriba de tus pestañas, para evitar que sólo se vean negras por una zona... ¡No lo olvides!
¿Ojos de mapache? No gracias...
Como hemos dicho antes, cada persona tiene una clase de pestañas... ¡Y también de ojos! Algunas personas son menos tolerantes a los productos, o simplemente sus ojos tienden más al lagrimeo por factores externos. Si eres de esa clase de personas, habrás sufrido los manchurrones de rímel en el párpado inferior una y mil veces... ¡No te preocupes! Tiene fácil solución, sólo tienes que aplicar una máscara resistente al agua.
Y en el caso de que tengas escogida tu máscara preferida y seáis inseparables... Siempre puedes dar una capa waterproof por encima de ésta!
¡A partir de ahora tu aplicación del rímel será impecable!
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