DIY: Piel luminosa y perfecta para una boda de día

El día de tu boda es un día para brillar… ¡Y tu piel tiene que brillar contigo! Por eso vamos a enseñarte cómo cuidar tu piel para que consiga un aspecto sano y radiante semana tras semana ¡¿Listas?!

¿Cómo consigo una piel sana y radiante el día de mi boda?

Para el día de nuestra boda es importante haber iniciado con antelación una rutina de cuidado facial para asegurarnos de que nuestra piel luce perfecta y luminosa en nuestro gran día.

En nuestro post de hoy os hablaremos de la línea Olay Regenerist Luminous, que hemos tenido la oportunidad de probar, y con la que podréis conseguir una piel luminosa y radiante. Pero lo mejor de todo… ¡es que es apta tanto para novias como invitadas!

Como en cualquier rutina de belleza, es necesario seguir una serie de pasos. Así que vamos a guiarte y explicarte qué productos debes utilizar y cómo debes usarlos para conseguir una piel perfecta, sana y luminosa con tan sólo tres pasos. ¡Vamos a verlo!

1. Limpieza

Limpia tu piel. La limpieza del rostro es un paso esencial  para que los ingredientes del sérum y la crema hidratante penetren a la perfección y en profundidad.

Para ello, vamos a enjuagarnos bien el rostro con agua tibia. Después, podemos utilizar un sistema de limpieza profesional como el de Olay, cuyo cabezal se adapta al contorno del rostro, incluso en la zona T y la barbilla.

2. Contorno de ojos

Con la piel ya limpia y preparada, vamos a aplicar una pequeña cantidad de la crema iluminadora para el contorno de ojos Olay Eyes con el dedo anular, haciendo movimientos en círculo. Al aplicarla, debemos aseguramos de llegar a las tres zonas básicas de nuestro contorno: las patas de gallo, la zona inferior y el párpado fijo (nunca el móvil).

También tenemos que tener en cuenta al aplicarlo que debemos sujetar y estirar la piel con el fin de que el producto penetre perfectamente.

3. Sérum perfeccionador del tono

El siguiente paso será aplicar una una gota del sérum perfeccionador del tono Olay Regenerist Luminous.

Con él conseguiremos que nuestra piel tenga un tacto sedoso y la prepararemos para recibir y absorber el resto de productos.

Además, tras varias semanas de uso, la apariencia de las manchas localizadas será visiblemente menor… ¡Todo ventajas!

4. Crema perfeccionadora del tono

El tercer y último paso será aplicar la crema perfeccionadora del tono Olay Regenerist Luminous. Con ella conseguiremos unificar el tono de nuestro rostro y actuará hasta en 10 capas, trabajándlas una a una para recuperar la luminosidad natural de nuestra piel, atenuando las manchas y rejuveneciéndola.

Aplicaremos una pequeña cantidad de la crema en las palmas de las manos para su mayor penetración. Después, comenzamos a realizar movimientos horizontales desde el centro de la frente hacia las sienes, desde la nariz hasta los pómulos, pasando por el labio superior a inferior y, por último, por la línea del mentón.

Dosificamos otra pequeña cantidad para la zona del cuello y escote y mediante movimientos verticales ascendentes cubrimos toda la zona… ¡ Y listo!

Aunque también podemos contar con Olay Regenerist Luminous SPF20

Se trata de una crema anti-edad optativa a la anterior que reenergiza, hidrata y protege de los rayos del sol para proporcionar una piel más luminosa. Gracias a sus principios activos, nos ayuda a renovar las células de nuestra piel, le aporta un tacto más suave y terso, ayuda a reducir el exceso de producción de melanina.

¡Y hasta aquí la rutina de la gama Regenerist Luminous de Olay para conseguir una piel llena de luz! ¿Qué os ha parecido?

Look natural

Ahora vamos a mostrarte cómo conseguir un look natural y luminoso con maquillaje para complementar tu piel radiante... ¡Vamos a ver cómo!

Rostro

Antes de comenzar, os recordamos que al aplicar los productos siempre deben de ir primero aquellos que sean en crema, y una vez los hemos dejado reposar unos minutos en la piel para que se asienten, es cuando debemos de empezar a sellar y modular el rostro con los productos en polvo. De la otra manera, nuestra piel puede no asimilar bien los productos, haciendo así que se nos cuarteen.

• Lo primero de todo es hidratar bien el rostro, asegurando antes que lo hemos limpiado bien. Antes de utilizar nuestra crema habitual de rostro, podemos aplicar un agua termal en spray para conseguir un resultado más jugoso y que nuestra piel tenga un extra de hidratación
• Cuando hemos aplicado la crema, lo dejamos reposar 1 minuto. Después, si tenemos un iluminador líquido, podemos mezclarlo con la base de maquillaje. Esto va a hacer que al aplicarla se vea radiante. Si no, también podemos aplicarla sin más. La distribuimos en forma de puntos por nuestro rostro, y lo difuminamos todo muy bien con una esponjita húmeda.
• Ahora vamos con el corrector. Aplicamos corrector en todas aquellas zonas que sean problemáticas y donde tengamos rojeces. La zona que más suele necesitar de corrector es la denominada zona 'T', que incluye parte de la frente, nariz y barbilla. De nuesvo, lo aplicamos en forma de puntitos y lo difuminamos con una esponjita húmeda.
• Una vez hecho esto, vamos a aplicarnos colorete. Para evitar usar productos en polvo y dejar que la piel brille por sí sola, podemos utilizar un labial en barra del color que más nos guste (rosado, rojo o lila), y aplicarlo a toquecitos en nuestros mofletes. Después lo difuminamos con los dedos... ¡Y listo! Un colorete precioso y súper natural en un instante.
• Ahora vamos a sellar el rostro, pero... ¡Ojo! a no ser que tengamos la piel muy grasa, vamos a sellar con polvos traslúcidos la zona de la ojera. Lo haremos así porque es la zona que más se suele cuartear, y así dejamos el resto del rostro con un brillo natural.
• Una vez hecho esto... queda la parte más importante: el iluminador. No queremos un iluminador demasiado artificial, ya que queremos que la piel tenga aspecto natural. Por ello, vamos a evitar los iluminadores con mucha partícula de purpurina y vamos a optar por aquellos que tengas tonos más salmón o carne. Si no dispones de iluminador, también puedes utilizar una sombra de ojos que tenga brillo y las mismas características que hemos descrito. Después, con una pequeña brocha, vamos a aplicar iluminador en el arco de la ceja, el puente y la punta de la nariz, el arco de cupido y los pómulos.
• Ya verás como al seguir nuestros pasos tu piel va a quedar preciosa y con un aspecto muy sano para el buen tiempo. Y ahora que tenemos el rostro listo... ¡Vamos a por los ojos!

Ojos

• Aunque seamos fans de lo natural... Admitámoslo, en una boda no podemos pasar de retocarnos ni un poquito los ojos. Por ello, esta es vuestra solución perfecta: vamos a lograr un resultado natural y muy favorecedor para vuestros ojos.
• Lo primero que vamos a hacer es cojer un lapiz de ojos marrón (o, en su defecto, una sombra de ojos marrón y una brocha delineadora) y vamos a delinear nuestros ojos desde la mitad hacia fuera, sacándolo un poco hacia el borde y creando así un pequeño rabillo.
• Una vez tenemos nuestro delineado, vamos a coger una brocha difuminadora y vamos a difuminar muy bien el color marrón, llevándolo un poco hacia arriba.
• Si eres rubia o tienes el pelo claro, para tí con esto puede bastar. En cambio, si eres morena y quieres definir un poco más la línea de las pestañas, puedes repetir este paso pero esta vez con un lapiz negro de ojos. Eso sí, vamos a asegurarnos de esta vez pegarlo muy bien a la línea de las pestañas, para mantener el efecto natural. Cuando hayamos trazado la línea, la difuminamos de nuevo con una brocha.
• Habréis notado que los ojos han ganado muchísima profundidad con dos detalles, ¿Verdad? ¡Pues ahora queda lo mejor! El rímel. Podéis aplicar las capas que queráis, aunque no recomendamos más de dos, para que no se vea demasiado artificial. Al aplicarlo, vamos a elevar con nuestro dedo el arco de la ceja, para que el párpado se estire y podamos alcanzar mejor cada pestaña. 
• Vamos a asegurarnos de que el goupillón aplica máscara desde la raíz de nuestras pestañas, y lo vamos a ir moviendo en zig zag hasta el final de las pestañas. Al hacer esto nos aseguramos de que las estamos rizando bien, estamos aplicando máscara en todas las zonas y además evitando molestos pegotes de producto.
• Y.... ¡Ojos listos!

Labios

• Con los labios os recomendamos un tono rosado o nude, para continuar con la estética natural del maquillaje. Tenéis muchas opciones: podéis aplicaros un gloss de color nude, un labial rojo a toquecitos para que no tenga mucha cobertura y quede rosado, o un tinte de labios, que os puede servir también como colorete y es la opción mas cómoda, ya que os aguantará mucho tiempo.
• ¡Y listo! Labios y maquillaje terminados. Natural, precioso y sencillo, ¿Verdad?

Y... ¡Esto ha sido todo por el DIY de hoy!

¿Os ha gustado? ¿Os animáis a hacerlo?

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