Bienvenidos los invitados en la ceremonia

En el momento de la ceremonia, uno de los aspectos a tomar en cuenta es la organización de los invitados. En principio puede ser una labor complicada, pero puede ser mucho más sencillo de lo que pensáis.

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Años atrás el protocolo solía ser rígido, no obstante, hoy en día hay más flexibilidad y muchas parejas se saltan ciertas normas y preparan la ceremonia, según sus gustos y necesidades.

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Pero, más allá de la libertad de organizar la ceremonia con los invitados, compartimos aquí algunos consejos que dictan el protocolo, que bien puede ser de utilidad:

La pareja de novios siempre deben estar sentados justo en frente del sacerdote, que oficiará la ceremonia, preferiblemente en el centro del altar. El protocolo de toda la vida, recomienda que la novia esté en el lado izquierdo, mientras que el novio a la derecha.

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Por norma general, debes recordar que las primeras sillas o bancos más próximos a la pareja de novio, estarán reservados para los miembros de la familia más cercana. Después de las primeras filas, es recomendable ubicar al resto de la familia y los amigos, que asistan a la ceremonia, respectivamente.  

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En el caso de la madrina se suele ubicar a la izquierda de la novia y el padrino a la derecha del novio. La madrina estará pendiente del vestido de la novia y de arreglar el velo, o la cola de la novia, si hace falta.

A la izquierda del altar, se situarán los testigos por parte de la novia, mientras que los del novio a su derecha.

Hay algunas parejas que utilizan tarjetas para reservar el sitio de los invitados en la ceremonia. En este caso, se coloca la tarjeta en la silla o banco, de manera que los novios organizan todo y prevén los asientos preferentes y así evitan inconvenientes, o que las personas más cercanas estén más aisladas.

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Ya a la salida del altar, las amigas y los familiares más cercanos, acostumbran a ponerse en la puerta en las primeras posiciones para lanzar el arroz, los pétalos de flores, o las mariposas…

Ana Tornero