Una preboda con un paseo por el Cantábrico
Cuando una amor nace de una noche de verano y ha crecido caminando y salvando las distancias, sólo un paseo a orillas del Cantábrico, fiel testigo de su historia de amor con el paso de los años, puede ser el preludio de un "sí, quiero".
Ibai y Sara son de Bilbao pero han paseado su amor por Noja en vacaciones, puentes y fines de semana desde hace 13 años, incluso su pedida de mano tuvo lugar en ese lugar tan especial para ellos. Por eso cuando Guillermo Rando, su fotógrafo, los invitó a dejar los zapatos en la arena y a caminar descalzos por la orilla, sólo el mar y la luz del atardecer pudieron conjugarse de la misma forma que lo hicieron ellos.
Besos, abrazos, sonrisas, saltos... y una complicidad que inunda los bellos disparos del fotógrafo acompañan cada paso de esta preciosa preboda en la maravillosa costa de Cantabria. Y es que la magia de las sesiones anteriores a las bodas residen en el vínculo que se crea entre los novios y los profesionales y que acaba en una magnífica conexión en uno de los momentos más importantes y especiales de sus vidas. Cuando no importa quien mire porque los sentimientos y las emociones están a flor de piel. Un momento que para Ibai y Sara también tendrá lugar en Noja.
Y si la vida es un paseo, ¿qué mejor manera de dejar nuestra huella en este mundo que caminar juntos?