Flores de invierno
Las flores, tu vestido de novia y la temporada son compañeros infalibles en el día de la boda. Y el invierno, además del frío inclemente, nos regala vida y armonía a todo el look nupcial.
Si estás tomando la decisión sobre el ramo de novia de los invernaderos y cultivos seleccionamos algunas alternativas a la hora de pasar por el altar durante estas fechas.
A pesar de que el invierno coloca paradójicamente a disposición una variedad cromática en cuanto a flores se refiere que van desde el blanco limpio, marfil, rosa, salmón, crema o champan, nos enamora mucho un bouquet de novia teñido de blanco puro y limpio, que hace un coqueteo glamoroso con ese vestido de novia “nevado”.
Otra de las flores de invierno más consentidas son las rosas y las anémonas (que se pueden mezclar con flores silvestres y son muy delicadas), si prefieres incluir un toque fresco y elegante a todo tu conjunto.
Nos ha encantado este ramo de flores de Preston Bailey, diseñado con amapolas blancas, perfecto para lograr combinar el toque clásico con un halo dulce. La apuesta es por un lazo negro que lo eleva a un nivel más sofisticado.
Preston Bailey
Con presencia dominante también destaca las camelias, que se reconocen por su infinidad de pétalos y son perfectas para los ramos de novia de forma redonda.
De igual forma, la cala o el lirio se ven de maravilla para aquellas novias amantes de los años dorados, pues además hacen juego con complementos u accesorios vintage.
Un “sí quiero” invernal, pero con mucha vida. ¡Las flores hacen lo suyo!