La joya in para tu boda

Uno de los complementos que más aportan al look nupcial son las joyas. Le dan ese toque de glamour y sofisticación. ¿Qué me pongo? ¿Las perlas, la diadema que usó mi mamá, o un collar elegante?

Para hacer esta elección, debes tener en cuenta tres aspectos fundamentales: el vestido de novia, el peinado y el resto de los accesorios que lucirás en ese gran día. Pero, lo más importante a considerar es el estilo de novia y la personalidad para seleccionar la joyería nupcial.

Por ejemplo, si amas la época dorada, una gargantilla de los años 20 puede combinar perfectamente con tu vestido de novia vintage. Y si eres una novia roquera, los pendientes largos con toques modernos, serán lo que andas buscando.

Zoara

En el caso de que quieras rendirle homenaje a un ser querido y te decantas por una joya familiar, contempla esas piezas que representan valor sentimental, como las perlas de tu abuelita, el brazalete art decó que usó tu mamá en su boda, o la pulsera de tu prima mayor. Tendrán un encanto y un brillo particular.

Si te vas a poner otros complementos más llamativos como una tiara, una diadema antigua, o un velo largo decorado,  lo mejor es usar unos pendientes redondos u ovalados pequeños y, dependiendo del tamaño, un collar. Los pendientes en forma de lágrima suelen ser una opción que luce bien en casi todos los casos. Recuerda que el centro de atención debe recaer en un sólo complemento preferiblemente.  

Cuando el vestido es de diseño muy elaborado (ornamentos, pedrería, muchos encajes), lo más recomendable es que no te recargues con joyas, luce las más sencillas posibles. Si el vestido tiene un escote atrevido, un collar discreto y unos pendientes medianos son perfectos para que tu rostro sea el que más llame la atención. Si el vestido es sexy mini, puedes jugar con un anillo o solitario que deslumbre. Y si eres atrevida con el color, no dudes en hacer un conjunto con los zapatos, el ramo de flores o el hilo conductor de tu boda y su paleta cromática.   

El cuello estilizado se verá mucho más elegante con un recogido, un moño alto, o una coleta. Para ello, apuesta por unos pendientes largos (ideal también para los cabellos cortos), y/ o una gargantilla de línea muy sencilla. Las novias de cabello largo que prefieren llevarlo suelto, con un semi recogido, o con ondas al agua, pueden perfectamente  ir acompañadas con unos pendientes un poco más exhibicionistas.  

Oliver Weber 

Queda prohibido:

• Combinar el oro con la plata
• Lucir joyas muy brillantes para una boda de día
• Evita forzar tu personalidad, usando una joya con la que no te identifiques