Una boda de fin de semana con gymkana y safari

Bodas reales | 03/06/2015

Un vídeo de boda para soñar con un "sí, quiero" al anochecer

Una boda que dura un completo fin de semana, no es una boda cualquiera. Una boda que comienza la misma mañana con una gymkana para los invitados no es algo convencional. Una boda con una novia que confecciona su propio ramo y tocado y el de todas las invitadas, tampoco parece que sea una boda al uso. Una boda con first look incluido, con concierto en directo, juegos durante la celebración y que acaba con un safari en familia al día siguiente tiene todas las claves para que ser el evento del año.

¿Os imagináis una boda así? Pues así fue el fin de semana tan especial de Raquel y Alejandro en el Hotel Valdepalacios. "Queríamos una boda diferente, fuera de lo convencional, donde pudiéramos disfrutar de los amigos y familia durante un fin de semana. Dándole un papel protagonista a los juegos y a la gastronomía, al paraje, las vistas, la naturaleza. Donde no nos pusieran pegas a nuestras ideas, puestos gastronómicos, cóctel largo todos de pie, juegos, gymkana, comida en la piscina, paella al día siguiente, un grupo de música en directo, sin límite de hora y además tuviese el mejor marco para la ceremonia", explica la novia.

Así, Raquel y Alejandro tuvieron la boda que soñaron. Ella vestida con un elegante modelo vintage de espalda descubierta y tirantes dorados de la diseñadora Laura Monge, él con un elegante smoking con fajín y pajarita. En una bellísima y emotiva ceremonia al anochecer. "El cielo esa noche era precioso, luna visible, estrellas y pequeñas nubes haciendo rallas sin tapar la luna", cuenta el novio. El banquete también tuvo su toque de originalidad con buffet de postres, un puesto mexicano con tacos, otro japonés de sushi y una mesa de quesos, además de una cena cóctel compuesta de 14 platos.

Y una boda así no se puede contar... una boda así hay que revivirla, meterse dentro y sentirla como si uno fuese un invitado más. Una boda así merece la emoción, la implicación y el sentido que le puso Render Emotion a su vídeo. Y ahora, gracias a ellos, nosotros podemos atrevesar la pantalla.