Una boda art decó a lo Great Gatsby

Siempre es un placer encontrarse con bodas que te teletransportan. Bodas con las que está permitido viajar y dejarse llevar gracias a la cuidad estética y puesta en escena, donde cada elemento y detalle cuenta para que hagamos un salto en el tiempo. Bodas cargadas de personalidad como ésta diseñada por La Tarara e inspirada en la novela del gran Fitzgerald, "The Great Gatsby".

Repasando las imágenes de Nice Tales Photography es fácil imaginar el sonido del descorche de las botellas de champán, el jazz provocador y las fiestas glamurosas y legendarias de los años en los que Nueva York bebía a escondidas. Y sólo viendo los looks de los novios, María y Oscar, ya adivinas que lo suyo no fue una boda tradicional.

La ceremonia se celebró en la iglesia Santa Anna de Barcelona con un maravilloso reportaje fotográfico exterior en el barrio del Raval. Un contraste más para esta boda que terminaría rompiendo esquemas en el hotel Avenida Palace de Barcelona. Un espacio que se prestaba a la perfección para representar los felices años 20 de la Gran Manzana con collares de perlas, diamantes, plumas de avestruz y pavo real, cortinas de espumillón y globos gigantes como elementos decorativos. Y que recibió a los novios entre pompas de jabón y confetti metalizado oro y plata repartido por mesas, suelos y escaleras.

Desde La Tarara nos cuentan otras claves en la decoración: "hicimos unos meseros basados en el art decó y en el seating plan pusimos varias imágenes modernistas. Aparte, en cada mesa pusimos un menú musical de lo que sonaría durante la boda. Detalles como el bodegón del cigar bar y del libro de firmas encajaban perfectamente bien con el Nueva York de los años 20. Para todo el proyecto alquilamos varios objetos decorativos como jarrones, un abanico gigante, candelabros, cajones, unas garzas de metal, unos abanicos gigantes, cojines, unas esculturas de garzas, etc… y varios instrumentos musicales como un par de trompetas, un saxofon, un gramófono, etc…". Todo perfectamente aunado y armonizado en una paleta de color con blanco, negro, rosa oro y plata.

Para el photocall prepararon una estructura de madera de dos metros y medio y lo trabajaron todo con papel. "La idea era hacer diamantas gigantes a partir de más de doscientos pliegues de papel metalizado oro, plata, negro y rosa para que las fotos saliesen destelleantes. Esto, claro está, junto con complementos de disfraces propios de la época fueron la guinda del pastel", explican. Como detalle de boda para los invitados los novios regalaron mini botellas de cava con un gran lazo de organza atado al cuello colocadas estratégicamente en cajas de madera antiguas sobre una mesa de antigua.

Una boda para soñar y muy especial para aquellos amantes de lo vintage, del jazz y del Nueva York de los años 20.

Lugar de la celebración: Hotel Avenida Palace de Barcelona